miércoles, 8 de diciembre de 2010

Breves palabras de sabiduría del libro de Mormón

Estimadas(os) hermanas(os),
                                                                                                 Ciertamente, Señor, estando tú presente,
Todo es alegre, y ausente, todo enojoso.
(Tomás de Kempis, Imitación de Cristo)


Habitualmente los críticos del libro de Mormón suelen apuntar sus ataques en sentido de cuestionar ya sea su validez histórica o describirlo como una invención y plagio literario de Joseph Smith Jr. No obstante lo anterior, son muy pocas las críticas susceptibles de ser realizadas en torno a lo doctrinal. Es más, sus ideas en torno a la doctrina de la trinidad; la finalidad de la actividad económica; la forma de administrar los sacramentos; las autoridades que deben regir los destinos de la Iglesia; las profecías e incluso, la forma de comportarnos en términos políticos superan ampliamente lo contenido de los pasajes más significativos tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento.

            Un ejemplo de lo dicho anteriormente, está relacionado con el tema de la naturaleza divina que llevo durante los primeros siglos del cristianismo a tantas herejías y confrontaciones. En el libro de Mormón y sólo en él (no en la Biblia), se encuentra de manera taxativa la definición del dogma trinitario. Esto es posible de leer en Alma 11:44[1]

Santísima Trinidad.

Y serán llevados y se les hará comparecer ante el tribunal de Cristo el Hijo, y de Dios el Padre, y del espíritu Santo, los cuales son un Dios eterno, para ser juzgados según sus obras, sean buenas o malas “[2].

Resurrección
            También nos habla con lo que sucederá con la vida más allá de la muerte y lo que sucederá con la resurrección. Lo importante que nos menciona en el pasaje de Alma 11,43 y 44 es que somos una totalidad compuesta tanto por cuerpo y alma. Esto último a diferencia de los evangelios que nos mencionan que seremos como seres espirituales parecidos a los ángeles. Además, nos menciona que nos recordaremos de todo y a no dudarlo, nos deja la posibilidad de volver a reunirnos con nuestros seres queridos. También una idea que es posible de resaltar  es aquella en la cual seremos condenados por nuestras obras y no solo por le Fe como lo sostiene equivocadamente el mundo protestante.

“Alma y cuerpo restaurado en su perfecta forma y conociendo lo que conocemos ahora teniendo un vivido recuerdo de nuestra culpa. (43)
Todos serán restaurados hombres y mujeres. Viejos y jóvenes. Justos e injustos y presentados ante el tribunal de DIOS para ser juzgados según sus obras. (44)[3]
           

La finalidad de la actividad económica

            Otra doctrina que aparece es precisar cual es el propósito de la actividad económica, esto último lo podemos encontrar en Jacob 2, 17-19 en donde se dice a los ricos que sean “sean afables con todos y liberales con vuestros bienes para que ellos sean ricos como vosotros. Pero antes de buscar riquezas, buscad el reino de Dios (18). Las buscaréis (riquezas) con el fin de hacer el bien: para vestir al desnudo, alimentar al hambriento, libertar al cautivo y suministrar auxilio al enfermo y al afligido.(19).

Autoridades

            También el anal de los nefitas, nos habla de las autoridades y oficios principales por los cuales deben regirse la organización religiosa, destacando los oficios de discípulos (apóstoles), ancianos, sacerdotes (presbíteros) y maestros. Es esta última designación que nosotros debemos seguir para regir los destinos de la iglesia tal como se encuentra en Moroni cap 3.1

La forma en que los discípulos, que eran llamados los élderes de la iglesia, ordenaban presbíteros y maestros.[4]

Administración de los sacramentos

En los capítulos 4,5 y 6 del libro de Moroni nos encontramos con un regalo dado por la divinidad a nuestro continente y la maravillosa obra de la Restauración, la correcta manera de administrar los sacramentos que nos bendicen en nuestra vida:

“Ni tampoco recibían a nadie para el bautismo  a menos que viniese con un corazón quebrantado y contrito, y testificase a la iglesia que verdaderamente se habían arrepentido de todos sus pecados “. Moroni 6; 2[5]

Profecías

En Mosíah 13: 43-46 también se consagra América como la tierra de promisión y de libertades pero ojo, nos habla de todo el continente americano y no sólo de Norteamérica como lo entienden la gente del coloso septentrional. En este libro se señala lo siguiente:

Y ahora deseo yo que esta desigualdad deje de existir en esta tierra, especialmente entre este mi pueblo; mas deseo que esta tierra sea una tierra de libertad, y que todo hombre goce igualmente  de sus derechos y privilegios, en tanto que el Señor juzgue conveniente que habitemos y heredemos la tierra, sí, mientras permanezca cualquiera de los de nuestra posteridad sobre la superficie de la tierra”.[6]

Política

             En política también tenemos una visión positiva y valorativa de lo que significa el modelo democrático de gobierno. No es neutro, muy por el contrario, señala en varios pasajes su opción preferencial por  la democracia como modelo y norma de los sistema políticos. Esto es bien importante, porque a diferencia de lo que aparece los consejos de Paulo en los cuales debemos aceptar cualquier tipo de autoridad, en el libro de Mormón se rechaza a cualquier forma de régimen político, sustentada en el poder de un individuo o pequeño grupo de personas. Podemos admirar tal postura  en el libro de Mosíah 29:26

“Ahora bien, no es cosa común que la voz del pueblo desee algo que sea contrario que es justo; pero sí es común que la parte menor del pueblo desee lo que no es justo; por tanto, esto lo observaréis por ley: trataréis vuestros asuntos según la voz del pueblo”[7]


Modo de comportarse en la Iglesia

            Por último nos enseña la correcta forma de participar e involucrarse en la iglesia que no difieren demasiado de lo que encontramos en el capítulo de Hechos de los Apóstoles en el Nuevo Testamento. Esta situación fue la normalidad durante las primeras generaciones de cristianos que vivieron en tiempos del imperio romano por ende, no es extrañar que en nuestro continente se desarrollase una vez concluido el ministerio de Jesús en América. Debe ser la norma por la cual como creyentes debemos vivir. Esto lo dejé arbitrariamente al final para que pensemos como la iglesia restaurada debe no en la medida de lo posible, sino en forma radical, cumplir con este principio básico que a continuación se describe:

Y enseñaron y se ministraron el uno al otro; y tenían todas las cosas en común, todo hombre obrando en justicia uno con otro. 3 Nefi 26:19

Y la iglesia se reunía a menudo a ayunar y orar, y para hablar unos con otros concernientes al bienestar de sus almas”.Moroni 6,5

La salvación no es obra individual sino colectiva tal como lo mencionan las citas de arriba y el libro de Mormón, contiene muchas perlas de sabiduría que si estudiamos con detención y profundidad, nos permitirá dar una buena defensa en el día de nuestro juicio junto a nuestro ABOGADO, MAESTRO Y SEÑOR, Jesús.

Saludos su hermano en Cristo,
Anciano Hernández.







[1] Libro de Mormón. Publicaciones de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Salt Lake City, Utah. 1993. Pág 282.
[2]  Ídem.
[3] Idem.
[4] Op cit pág 627.
[5] Ibídem pág 627-628.
[6] Libro de Mormón Op cit 244.
[7] Ídem.